sábado, 6 de noviembre de 2010

Anochece


Viajar con vos

es dejar un poco la alegría del mundo

para ir a la alegría de la vida

viajar con vos, es

en primera instancia

un lujo que me doy


No tengo tanto dinero para entender

como soy capaz de tener acceso

a un poco de tu compañía

que huele a un viaje cansado y abatido

de pensar que todo entre nosotros

está mal


Espero ancioso el día

en que me veas

como algo más

que un simple compañero de asiento

no hablo tanto, por que oler tu perfume

me corta la lengua

esa que está anciosa por besarte cada mañana


Anochecerá

no sé para cuando

pero cuando eso pase

tal vez moriré con vos

un viaje tan largo

para un compañero

que bajará antes de la parada


Antes de que sepa

lo mucho que quisiera

estar con él para toda la vida


Supongo que puede parecer extraño, pero aquella imagen, aquella inocente imagen resultó al cabo, el factor mas esclarecedor, el impacto más violento, para mi vida, que agonizaba por pedacitos, como un bocanada de humo, con un cigarro que apenas encenderé.

Suelo tener con mi hermano, esos delirios donde encuentro la paz en las cosas más extrañas, de más chiquillo, pretendía que la felicidad se encontraba en las manos, en esas que me daban la oportunidad de tocar, abrazar, y sentir a la gente que quería, con ellas hacía, y rehacía infinidad de particulas doblegadas de color y olor, pero estaba equivocado. La ciudad es difícil, cuando uno viene de un lugar menos peor, allí en el pueblo solía patinar, rayar paredes, y leer cuentos de Elvira Lindo, mientras en mi ipod, sonaba música de Keegan Dewitt, con un Texas Snow, o un Quiet city que sólo me recuerda eso, a todo lo que en algún momento sentía como felicidad. A mí me gusta mucho sentir eso, que al menos tengo algo que presumir, una felicidad de esas raras que desconjonan, que te hacen sentir asediado por un montón de cosas bonitas.

Mi felicidad del ahora, está alejada de esas tardes veraniegas en Misantla, donde iba por doquier en busca de una buena taza de té, y charlas de señoras 60tonas, hablando de lo difícil que es encontrar un lugar en el mundo, o un mundo que tenga algún lugar para nosotros.

Ahorita mismo, voy al baño, y me veo como un Bob Harris, un hombre de edad madura, que graba comerciales en Tokio, se encuentra con una chica mucho mas menor que él, y se enamora. El encuentro es fugaz, nadie ha dicho que ellos tienen algo, pero disfrutan estar ambos juntos, solos, divierténdose, y mofando con la vida, yo algún día siempre anhele ser encontrado, mi condición de vida me hizo alejarme del anarquismo existencial, nadie podía desatarme de los hilos con los que he nacido, así me tocó vivir, con un montón de gente que aún depende de mí, muchas veces, quisiera pararme, y mandar todo a la mierda, como debiese ser, pero aún no estoy preparado para irme del todo, voy lento, con dos dedos, torpe pero pinchando las letras que quiero dar.

Para variar, siempre regreso a la misma canción de siempre, siempre regreso al mismo cuarto donde duermo solo, y cansado, de tanta putada, allí donde todo empieza, y donde todo termina siendo lo mismo de siempre, algo que al final, sí fué real

Stand by me
Oasis

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